Arquitectos: Dietger Wissounig / Fotos: Paul Ott
En la región Carintia, un estado federado o Bundesland, localizado en el sur de Austria, contiende Haus Gunhold para ser elegida como una de las 9 mejores casas de este país.
El reto y lo que caracteriza el planteamiento del proyecto es, principalmente, la adaptación a una adecuada circulación de una silla de ruedas para uno de los miembros de la familia, parcialmente inmóvil. Asimismo, cómo hacer que la casa, cercana al arroyo arbolado, estuviese en armonía con el hábitat.
Antes de planificar el arquitecto pasado mucho tiempo con los residentes para aprender acerca de sus hábitos cotidianos.
El resultado es un proyecto a rad de suelo, con una estructura relacionada con el entorno a base de madera, con ventanas de piso a techo con una propuesta diseñada desde adentro hacia afuera.
Los requerimientos referentes a la silla de ruedas de su habitante define todos los ámbitos; no hay ningún tipo de desnivel o salto. Asimismo, la casa está protegida de los vientos y el clima, con un sistema de calefacción autosustentable, con una perforación profunda para promover la energía geotérmica, solar y pozos privados, que proporcionan un racional uso de recursos renovables, y la eficiencia energética al máximo.
Las necesidades de cada residente se identificaron en términos de prioridades de diseño y se convierte en calidad de vida.